*** DIARIO ***
Punto 342. 28 de noviembre de 1937. Esperando el tren en la estación de Niza, rodeada de mis paquetes, yo oraba por el advenimiento de Su Reino. Él: “Es tu corazón el lugar en el que Yo Me refugio; eres la única que ora en este andén."
A la hora de la Misa, esta mañana, en la iglesia de N.S. de Niza, me había yo revestido en espíritu con la Túnica ensangrentada de Cristo, para purificarme. Él me mostró a la Iglesia, tejida de un solo hilo y sin costuras.
*** REFLEXIÓN Y COMENTARIO ***
En las expresiones dirigidas hacia Gabriela percibimos con asombro la “necesidad” que en ocasiones manifiesta Jesús de sentirse acompañado y consolado; sin duda, una preciosa muestra de la humanidad de Cristo.
Por otro lado, nuevamente, nos aparece en el diario un relato del particular misticismo de Gabriela, quien al parecer no recibió visiones en éxtasis pero sí, al parecer, pensamientos muy intensos con los que Dios quería transmitirle algo.
Estación de Niza
PRÓXIMA PUBLICACIÓN DEL DIARIO: 29 de noviembre de 2018.
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