1939. 15 de junio.

*** DIARIO ***

     Punto 705. 15 de junio. "La dislocación de Mis Miembros... los arroyos de Sangre... los Ojos enceguecidos..., y la Corona de espinas. Yo tuve deseo de Ella como el que una mujer mundana puede tener de un vestido nuevo.”

     "Dáteme tal y como eres. En todo momento de tu vida, tal y cual eres. Es cierto que en un solo instante puedo Yo cambiarte, pero es indispensable que lo creas así y que Me entregues tu confianzá. Para que Me la dieras, te escogí; y te he dado los medios necesarios. Agradécemelo."

     Yo interrumpía mi trabajo de copiar Sus Palabras para ver las canoas que pasaban en el Loira. Como sonriendo, me dijo: “Los niños chicos tienen necesidad de pequeñas distracciones."

*** REFLEXIÓN Y COMENTARIO ***

     No sería lógico desaprovechar una ocasión como esta para hablar de la Pasión Redentora de Cristo, la fórmula buscada por Él para salvarnos dejando patente Su extrema entrega por Amor a nosotros. También es de reseñar que Él nos acoge tal y como somos, con independencia de nuestras faltas y carencias.

      Sin embargo, hoy quisiera detenerme en la última parte, donde refiere Gabriela una pausa en el descanso de su tarea. Creo que es sumamente importante considerar que seguir a Cristo no significa despreciar las distracciones legítimas, los pequeños placeres de la vida, el disfrute de todo lo bueno que nos rodea. De hecho, las pasiones son necesarias para mover el corazón, para sacudirnos del letargo, la pereza, y la peligrosa tristeza. 

      Me parece importante hacer hincapié en este tema, perfecto antídoto para no caer en ese amargo fariseísmo que tan solo sabe denunciar pecado a la mínima de cambio. Recordemos que la Esperanza se alimenta de pequeñas esperanzas...

Vistas del Loira desde la terraza de Gabriela en Le Fresne (c) foto Manolo, dj

PRÓXIMA PUBLICACIÓN DEL DIARIO: 16 de junio de 2020.