1941. 10 de julio.

*** DIARIO ***

     Punto 1121. 10 de julio. Después de la comunión. "Tu tesoro es tu momento presente. Si no Me ofreces, uno por uno, tus instantes, pierdes tu tesoro."

*** REFLEXIÓN Y COMENTARIO ***

     Nuestras pequeñas acciones, unidas a los Méritos de Cristo, adquieren un valor infinito. Días difíciles todos tenemos, también días de distracciones, y no siempre tenemos la mirada puesta en Dios. Por eso, apenas nos demos cuenta, tiene mucho mérito ante los ojos del Señor ofrecerle el momento actual, este o aquel acto, también nuestro estado de ánimo. Y ya se encargará Su Misericordia de obtener Gracias innumerables para nosotros y nuestra gente querida.

       Es muy recomendable por tanto hacer un acto de ofrenda al comenzar el día, algo así como lo que sigue:

Padre Eterno:

Yo te ofrezco todos los actos cotidianos del día,

para que, unidos a los Méritos infinitos de Tu Hijo,

sean para ti una ofrenda agradable;

para Tu mayor Gloria, por la pronta llegada de Tu Reino, y por la salvación de las almas.

También para consuelo de Jesús en la noche oscura del Huerto de los Olivos, y consuelo de los Dolores de María.

Hoy te pido especialmente por (…)

Imagen tomada de Pixabay.