1942. 20 de enero.

     Gabriela está rezando el Via Crucis. En la duodécima estación recordamos la Muerte de Cristo, aquella que nos ganó la salvación. Jesús no tarda en recordarle nuestro deber de interceder por los demás, y para ellos, esforzarnos en alcanzar la santidad…

*** DIARIO ***

     Punto 1206. 20 de enero de 1942. 12a Estación. "Ruega por los pecadores, pero también por los justos, a fin de que devengan santos. ¡Mis pobres pequeños! ¿Quién es santo? Solamente Yo, en vosotros. Y cuando haya santos cambiará la faz de la Tierra. Recuérdalo: unos pocos bastan para salvar una ciudad."

*** REFLEXIÓN Y COMENTARIO ***

     Alcanzar la santidad debe ser la meta de todo cristiano. Tal vez debemos despojarnos de ideas preconcebidas, las cosas suelen ser siempre más sencillas. Fácil no es, aunque nos basta la Gracia de Dios, pero nuestra libertad debemos orientarla hacia este bien, y la debilidad espiritual que nos inclina hacia la tentación no debe ser subestimada. 

      Algunas veces necesitamos un empujón de esperanza, como si nos adelantasen el final de la historia y viésemos que todo esfuerzo merece la pena. Pensemos en ese Banquete que no termina, en esa Resurrección que nos devolverá a nuestra vida corpórea pero esta vez sin la debilidad de nuestra naturaleza herida, que ahora sucumbe a la enfermedad y las necesidades biológicas. Pensemos en cuántos quisiéramos tener a nuestro lado, pongámosle nombres… no tardarán en aparecer miedos relacionados con la situación espiritual de muchos de nuestros seres queridos, algunos de los cuales tal vez incluso manifiesten desprecio hacia las verdades de Fe…  Y entonces… ¿no nos llenará de ánimo palabras como las que hoy trae Jesús a Gabriela? ¿No nos damos cuenta de lo inmenso de esa frase que dice “unos pocos bastan para salvar una ciudad”?…

        Y ahora… ¿no sientes deseos de intentarlo?…

Imagen tomada de Pixabay 

PRÓXIMA PUBLICACIÓN DEL DIARIO: 21 de enero de 2023.