La primera obra teatral que escribió Gabriela Bossis por encargo del párroco de Fresne, don Olive, se llamó “El encanto”. El cura dio libertad a nuestra escritora para la elección del tema y la trama, tan solo le pidió que buscase algo que llamase la atención de los jóvenes, que necesitaban de distracciones sanas en las que pudiesen recibir alguna enseñanza moral al mismo tiempo que se divertían. Era el año 1923 y la acogida de la obra fue tan entusiasta que rápidamente don Olive mandó numerosas copias a las parroquias de la comarca y encargó a Gabriela la organización de un equipo de jóvenes actores, los cuales la acompañarán por numerosas zonas a llevar la interpretar opereta. Sería la primera de las muchas, una faceta que acabó suscitando el interés de una editorial que comenzó a vender sus obras en las librerías, y que la llevó a recorrer comarcas, países, e incluso a cruzar continentes.
De alguna manera, ese encanto que constituyó el eje de su primera obra decía mucho de la propia Gabriela, cuya vocación estaba en consonancia con la influencia de bondad y alegría que debía irradiar a los demás. Y precisamente hoy, veinte años después, Jesús le recuerda que ese mismo encanto debe estar en todo…
*** DIARIO ***
Punto 1296. 4 de febrero de 1943. "Debe haber un encanto en tu voz y en todo lo que haces, ya que vives para Mí." Yo: "Bien quisiera estar segura de eso, Señor." Él: "Repítemelo con frecuencia para que ante ti misma no pueda haber ningún equívoco. Y eso Me agradará. ¿Para qué o para quién más podrías tú vivir? Todo pasa, sólo Yo quedo. Así como solamente Yo tengo necesidad de tu vida. Sí, Mi Amor desciende hasta eso; tiene necesidad de Sus creaturas en Una Intimidad de amor... ¿Y acaso no Soy Yo 'Uno entre vosotros'? ¿No Me llamé a Mí mismo ‘el Hijo del Hombre’? Tengo necesidad de la ternura de Mis hermanos. Fui a mendigar la ternura de Pedro, Santiago y Juan durante Mi Agonía. ¡Y cuánto es lo que doy a las almas que bajo el influjo de Mi Gracia, Me dicen su amor! Pero mucho más es lo que doy a las que vienen a Mí sin previa invitación y que sienten no poder vivir sin Mi Compañía. Sé una de ellas, hija.
Ponme como delante de tus ojos y lo verás todo, y verás a todos como a través de Mí... Entonces habrá fiesta en Mi Corazón, porque el tuyo no podrá ya apartarse del Mío. Esta fue la consigna para este año. ¿Lo recuerdas?: `En Nuestros Corazones. Yo en ti y tú en Mí'. Piensa con frecuencia: `sólo Él tiene necesidad de mi vida, sea lo que fuere lo que otros puedan necesitarme'. Porque no hay otro fuera de Mí que tenga ese deseo con la misma intensidad. Es el Deseo de un Dios, ¿cómo podrías tú imaginar Su Fuerza? Toma la delantera y Él te colmará."
*** REFLEXIÓN Y COMENTARIO ***
Todo el diario es un continuo aprendizaje sobre Quién es Cristo, sobre cómo es Su Corazón, sobre cómo es Dios. La necesidad que tiene todo un Dios de sus criaturas, de recibir algo de ellos, sobrecoge. Hasta el punto de definirse a Él mismo como un mendigo que se desvive por recibir algo de nuestra ternura. ¿De qué otra manera podría Él, que es todo Santo, haber cargado con nuestro pecado, ese que le repugna hasta el horror…?
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| Imagen tomada de Pixabay. |
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