Se acerca la Navidad. Gabriela está impaciente por compartir el precioso momento en el que rememoramos el nacimiento del Salvador. Lo grandioso de esto es que el Rey del Universo ha preferido nacer en la pobreza, en el seno de una familia humilde a la que no le faltarán las incomodidades y las dificultades. Será la primera de las enseñanzas: hacerse pequeño para poder aspirar a lo grande...
*** DIARIO ***
Punto 811. 24 de diciembre. A1 claro de luna, en una avenida. Alegre por la Navidad, cuya hora se acercaba. "Pues si, alégrate. Si supieras lo que era el Mundo antes de Mi Venida... Estaba Dios y estaban los hombres; pero ahora Dios se ha hecho uno, entre los hombres. ¡Uno de vosotros! ¿Cómo medirás ese Amor? ¡Una Unión así, hecha posible entre vosotros y Él! ¿Ves la diferencia? Dame gracias con todas tus fuerzas y sé Mía más que antes."
Punto 812. 24 de diciembre, después de la comunión. "Aquí está el Mesías, el Salvador, tan deseado y esperado. El Salvador del Mundo, de todos, de ti.
Pídeme que te salve de tus faltas cotidianas, de tus hábitos reprensibles, de lo que hay en ti de malo... y Yo te salvaré. Trata de multiplicar los actos de Caridad, de evitar las faltas de la lengua, pensando que Yo estaré contento."
*** REFLEXIÓN Y COMENTARIO ***
La sobreabundancia de Dios siempre nos excede. Él siempre da más, sin medida, pero también nos pide a nosotros un pequeño esfuerzo, una mínima colaboración. En este caso, nos pide un poquito de vigilancia para controlar nuestras debilidades, y una generosa acción caritativa. Así, dejándonos acompañar por Él, iremos marcando el itinerario que Su Providencia nos haya otorgado...
Feliz Navidad.
(c) foto Manolo dj.
PRÓXIMA PUBLICACIÓN DEL DIARIO: 25 de diciembre de 2020.