Gabriela ya había incorporado en sus prácticas de piedad algunos sacrificios en aras de alguna intención especial suya cuyo contenido no conocemos. Hoy, además de ello, Jesús la invita a que todos los jueves realice la llamada Hora Santa. Será un tiempo empleado en acompañarle en persona en algún templo, estando con Él, ante Su Presencia física en el sagrario o en la sagrada forma convenientemente expuesta.
Como iremos viendo en el resto del diario, los diálogos fueron bastante intensos en dichas “horas santas”...
*** DIARIO ***
Punto 716. 28 de junio. Nantes. "Honra Mi Corona de espinas. Fue tan terrible para Mi Cabeza, pero tan dulce para Mi Amor.
De hoy en adelante harás la hora Santa los jueves. Quiero que pases esa hora conmigo. Al principio te será necesario un esfuerzo, pero luego no te costará. Recuerda las primeras veces que dormiste en el suelo y, ¿ahora? Lo mismo tus primeros Via Crucis. Te costaron, pero ahora no te cuestan. Hija querida, no Me abandones nunca, Yo estoy siempre contigo."
Por la calle: "Que tu mirada vuelta a Mí sea una comunión espiritual."
*** REFLEXIÓN Y COMENTARIO ***
“ Misericordia quiero, y no sacrificios”
Con estas palabras que Cristo nos dejó en el Evangelio, Él quiso poner el énfasis en el amor, en la entrega y el perdón. Sin embargo, ese amor se expresa de muchas formas, y son muchos los santos que han encaminado oraciones y ofrendas en favor de otros y como contribución al plan de Dios. Estos sacrificios podemos plasmarlos en un ejemplo práctico, como un ayuno voluntario unido a la oración en favor de una persona enferma, algo que siempre da fruto (aunque los frutos a veces son distintos a lo que nosotros esperamos).
Un pequeño esfuerzo , ofrecido a Dios en unión a los Méritos de Cristo, alcanza, por este hecho, un valor infinito...
Jesús expuesto en una hora santa en cualquiera de nuestros templos católicos.
(c) foto Manolo dj.
PRÓXIMA PUBLICACIÓN DEL DIARIO: 30 de junio de 2020.